FAMILIA, TECNOLOGÍA Y CIUDADANOS DIGITALES

5 cíber consejos para tus iKids (y para ti)

Cuando estamos de vacaciones nuestra relación con las pantallas se transforma (las utilizamos más o las utilizamos menos que en la vida diaria; el caso es que se transforma). Quizá compartes más cosas en redes sociales o quizá optas por hacer un OFF total y apagar móviles y tablets. Quizá ves más películas y series porque te entretiene o quizá desenchufas la tele y optas por respirar aire puro. Seas como seas, el cambio es puntual, lo sabes; y la vuelta al mundo real implica normalmente el regreso a tus «costumbres tecnológicas».

En cuanto a los iKids, la principal diferencia «digital» cuando están de vacaciones es que los padres o levantamos la mano y hay más «tiempo de pantalla» o nos ponemos tercos y demandamos que ellos también desconecten de la vida conectada por unos días. Seamos como seamos, conviene recordar que NO HAY UNA ÚNICA MANERA CORRECTA DE CONVIVIR CON LA TECNOLOGÍA y que, con la vuelta a la rutina y al orden, es importante volver también a las bases de la relación saludable con las pantallas: normas, ejemplo y conversación.

Si tus hijos tienen su propio dispositivo o acceden a uno de forma habitual (un móvil, una tablet, un ordenador), si empiezan a moverse en redes sociales, si están en Instagram o en Snapchat o tienen WhatsApp, envían correos electrónicos o juegan en línea, aprovecha el inicio de verano para sentarte con ellos y recordarles estos 5 consejos para llevar una vida online sana, segura y positiva:

1. “Cuida tu dispositivo” – responsabilidad

Dile a tu iKid que te avise si tiene que actualizar versiones de sistema operativo o de seguridad o si recibe mensajes extraños que le dicen que tiene que instalar un programa que no conoce. Revisa con el iKid los sistemas antivirus que tenga instalados (especialmente si se trata de un ordenador) y habla con él/ella de cómo evitar problemas con la cámara web (que esté desconectada cuando no la utilice). Si el iKid es pequeño y no entiende de estas cosas, ocúpate tú de ver que todo esté al día, de eliminar aplicaciones que no se utilicen o actualizar versiones de apps que sí se utilicen. Y si el iKid es mayor, ocúpate de que entienda que esto es importante. Igual que no llegamos la habitación de juguetes inútiles, no llenamos el dispositivo de apps inútiles. El tema de las aplicaciones (elegirlas, actualizarlas, descargarlas) es fundamental.

2. “Cuida tus perfiles” – seguridad

Recuérdales que es importante elegir buenas contraseñas y cambiarlas con frecuencia. Recomiéndales que no tengan activada la geo-localización ni en el móvil ni en sus redes sociales, salvo cuando realmente la necesiten. Insiste hasta la saciedad en que tengan bien configurados sus ajustes de privacidad cada vez que utilicen perfiles online (en redes sociales, en apps de música o juegos, en apps de mensajería tipo WhatsApp o Snapchat o Kik…). Vuelve a hablar sobre cómo elegir bien los nicknames o nombres de usuario y la foto de perfil. Aconséjale que no se relacione con extraños y que te avise si le pasa algo desagradable con el dispositivo.

3. “Cuida tu imagen” – identidad

Somos lo que somos. Y lo que parecemos. Y ahora también somos lo que publicamos en la Red. Recuérdales que no salen de casa descalzos, que no se presentan a cualquiera por la calle, que se lavan de vez en cuando e incluso se peinan, que no se pasean desnudos por la calle. Así que, como lo online es parte intrínseca de quien eres offline, insiste en que piensen dos veces antes de publicar algo (una foto, un comentario, un post). Casi nada desaparece de Internet, así que mejor subir fotos que tengan algún sentido o pensar si lo que van a publicar lo dirían a la cara también. Y que compartan cosas que sean suyas, no copiadas ni no acreditadas. No se trata de estar todo el día censurándose, pero sí de dedicar 30 segundos extras a pensar en qué vas a comentar o compartir. Pero además, en la construcción de su identidad digital, es importante que nosotros seamos los agentes de cambio que les inspiren para ser personas interesantes, creativas, optimistas… también online. Esto de Internet tiene sus cosas buenas, así que podemos hablar con los iKids sobre formas de contar que les gusta el surf o la fotografía o el rock o el baile, sobre maneras de expresar su creatividad y de compartir sus sentimientos…

4. “Cuida a tu entorno” – empatía, compasión, inteligencia…

Diles a tus iKids que la vida real tiene todo que ver con lo que haces online. Diles te avisen si ven que sus amigos hacen algo raro en Internet o en chats. Recuérdales que es mejor no ser testigos mudos de un mal comportamiento (online, offline), y que no deben compartir (ni contribuir a viralizar) fotos delicadas con cualquiera, porque se pueden meter en un lío (o meterte a ti en un lío si el dispositivo es tuyo). Recuérdales que detrás de la pantalla siempre hay personas, que es mejor ser positivo que criticón, que habrá que intentar ponerse en la piel de los demás. Explícales que un conflicto es mejor resolverlo cara a cara, que lo escrito queda siempre, que hay muchas formas de contar que estás de viaje y muchas maneras de expresar amor o desencanto. Diles que está bien buscar su propia identidad y que no hace falta odiar al de enfrente para sentirse más importante. Y tampoco hace falta ser el rey del postureo 😉

5. “Cuídate” – hay tiempo para todo

Recuérdale que hay que dormir sin dispositivos de por medio, que no se conecta uno mientras come o cena en familia, que el exceso de conexión no es bueno, que hay tiempo para todo y que más allá de su dispositivo también hay vida, risas, deporte, naturaleza, libros, estudio, amigos, música. Dile que la tecnología es como las hamburguesas -y no le regañes por estar delante de una pantalla sin antes saber el uso que en ese momento le está dando a esa pantalla, lo mismo te sorprendes-.

***

Estos consejos tienen mucho que ver con habilidades digitales que tú mismo puedes inculcar en tus hij@s aunque no sepas nada sobre tecnología. Porque se trata de otra cosa, no de informática. Se trata de equilibrio, diálogo, límites, valores y conocimiento. Sí, también conocimiento. De cómo convivir con el mundo actual. Ellos tienen que aprender -porque no saben- y tú también.

Y todos estos consejos se aplican también a los dispositivos de los padres, así que ya sabes 😉

Un móvil, una tablet o un ordenador, una consola o una televisión, nos dan acceso a un mundo global de conexión, información y entretenimiento. Pero no son estas máquinas ni es la gran web las que nos ponen en peligro físico, psíquico, social, personal o incluso económico. Es nuestro uso de los dispositivos el que marca nuestro bienestar. Cómo los usemos –nosotros y nuestros hijos- es la clave. Nosotros somos la web. Así que nosotros podemos ser el cambio digital. #BeTheDigitalChange

Bss,

M.

Breve cuestionario para reflexionar sobre si debes revisar tu propio auto-cuidado online:

• ¿Tienes antivirus instalado en tu ordenador? ¿Y en los dispositivos móviles?
• ¿Tienes la última actualización disponible ya instalada en tu móvil?
• ¿Y tu cámara web: está desactivada o siempre activada?
• ¿Tu perfil en Facebook o Instagram es privado del todo? ¿Incluso en la parte de geo-localización?
• ¿Y tu foto de perfil –WhatsApp incluido? ¿Es solo tuya o también de tus hijos, hermanos, padres?
• Revisa alguno de tus perfiles en redes sociales. ¿Volverías a subir todo lo que has compartido en el pasado o te arrepientes de alguna publicación?
• ¿Alguna vez has comentado con algún conocido que algo de lo que ha compartido en Internet o en WhatsApp no te ha parecido bien?
• ¿Has comentado con alguien que no quieres que te etiqueten o que no habías dado permiso a que te incluyeran en un grupo de contactos?
• ¿Cuántas horas al día estás delante de algún tipo de pantalla? ¿Miras el móvil nada más levantarte?
• ¿Cuántos mensajes innecesarios mandas por WhatsApp cada día?
• ¿Has recibido alguna vez un mensaje de alguien desconocido y has contestado? ¿Le das tu móvil o mail a cualquiera?
• ¿Cada cuánto cambias tu contraseña y cuántas usas? ¿Cómo las creas?
• ¿En cuántos sites de Internet tienes perfiles y cómo los actualizas?

¡¡Ánimo!! Yo tengo todo por mejorar 😉