FAMILIA, TECNOLOGÍA Y CIUDADANOS DIGITALES

4 noticias para que sepas más sobre Internet y presumas con los iKids

En muchas de mis conferencias digo que los padres de hoy somos súper héroes. Porque además de sacar adelante a familias y educar a nuestros hijos lo mejor que podemos, somos las primeras generaciones de progenitores que añaden la tecnología y la hiper-conexión a los retos ya importantes de la paternidad.

Nuestros iKids pueden comunicarse de forma instantánea con el mundo, tienen cantidades masivas de contenidos que consumir a golpe de click, pueden desear algo y tenerlo vía e-commerce en menos de 48 horas, pueden acceder a todo tipo de información casi sin que te des cuenta. Nuevos tiempos, nuevos problemas. Pues nuevos problemas, nuevos súper héroes.

Como en esto de la ePaternidad no se trata de saber informática, sino de «saber» a secas sobre la vida que nos toca vivir, de vez en cuando os propongo 4 lecturas para ir sumando ‘cultura’ tecnológica o digital.

Éstas son las de hoy:

¿Cómo funciona Internet?

¿Cómo es posible llevar datos de un lado a otro del mundo?  Pensarás que todo va por satélite, pero no, resulta que actualmente hay desplegados más de 1.000 millones de metros de cables submarinos que se encargan de gestionar la práctica totalidad de las comunicaciones transoceánicas. Estos cables descansan sobre el fondo marino, incluso a 8.000 metros de profundidad, enterrado bajo una capa de arena, donde normalmente no sufre daños.

• Artículo publicado en TicBeat, firmado por el periodista Alberto Iglesias: Los cables submarinos que conectan digitalmente el mundo.

Internet no es gratis. Para conectarse, los iKids necesitan que tú pagues la wi-fi de casa al proveedor que corresponda o que pagues la tarjeta o el contrato que permite que su tablet o móvil tenga 3G ó 4G. Cuando se acaban los datos, para tener más otra vez hay que pagar. Y si a esta concienciación añadimos un poco de ‘cultura’ sobre cómo funciona esta conexión que nos permite hacer Skype con un amigo en A Coruña o mandar un mensaje por WhatsApp a una amiga en San Francisco, mejor que mejor.

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Adiós texto, hola video

Dicen que cada vez tenemos menos tiempo para leer, que el contenido ya no es el rey, que el video manda y que lo que podamos VER en 3 minutos es lo que preferimos. Según Cisco, en 2017 el video online representa el 69% de todo el tráfico de Internet que los usuarios de todo el mundo consumen día a día. Es la herramienta fundamental para satisfacer nuestras necesidades de información y entretenimiento. Primero fue YouTube; luego, Netflix y el resto de plataformas nos trajeron series y películas (tanto, que gracias a nuestra suscripción pueden producir contenido propio). Las redes sociales también han incorporado: Snapchat, Stories en Instagram y estados en WhatsApp, Facebook Live… reflejan los nuevos códigos para producir y consumir contenido audiovisual: cuanto más breve, cuantas más sensaciones genere, cuanto más cuente, más atractivo resulta. El video, en streaming o como retrato de una situación, gana poder frente a la foto y el texto. Sobre todo para «contarse en directo».

Es fundamental que en casa trabajemos con los iKids la importancia de saber cuidar lo que escribimos y saber elegir e interpretar lo que leemos, dando valor al texto. Y también es fundamental entender que lo visual les atrae enormemente, que es más fácil de consumir, que requiere de una menor concentración y que, cuando son ellos los que crean y comparten esas imágenes en movimiento, están lanzando un mensaje al mundo. Aunque Facebook no es la red social que más atrae a niños y adolescentes, sigue siendo líder en número de usuarios. Y mientras no desaparezca, lo más probable es que los iKids terminen ahí, en algún momento. El futuro de Facebook es el video, no sólo el que tú crees y compartas, sino el que otros diseñen para que tú lo consumas; si tienes perfil, ya sabes que cada vez se hacen más vitales todo tipo de videos. Por eso, la empresa de Mark Zuckerberg ha lanzado ‘su propio YouTube’, al que han llamado Watch.

• Noticia de Expansión, firmada por Javier G. Fernández: Facebook lanza su propio YouTube.

En alguna conversación con tu adolescente puedes sacar el tema de que «el video es el rey» y de cómo Facebook, que tiene casi dos mil millones de usuarios (y por cierto es dueño de Instagram y WhatsApp y cruza los datos), ha creado Watch. El teenager se quedará alucinado ante tal postureo cultural 😉

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Lo que cuentas sobre ti cuando navegas por Internet

Seguro que has oído hablar de datos personales y privacidad. Seguro que sabes que nuestra información personal (nombre, mail, dirección, edad, filiación religiosa, tendencias políticas…) y nuestros hábitos (de compra, de navegación…) son la moneda de cambio en los tiempos que corren. Seguro que alguna vez te has preguntado qué es eso de las ‘cookies‘ y por qué te aparecen anuncios en la pantalla de algo que has buscado hace un rato en Google. Seguro que te has cuestionado cómo es posible que, al crearte un perfil en Instagram o Facebook, tu móvil te sugiera personas a los que seguir, que justo se corresponden con contactos en tu agenda. Bueno, el caso es que los datos se cruzan, lo que buscamos-publicamos-comentamos queda registrado y siempre habrá alguien que lo quiera utilizar (fundamentalmente con fines comerciales).

Existen además empresas, llamadas data brokers, que se dedican a rastrear la vida digital de los internautas a partir de su navegación, comentarios e interacciones en las redes sociales, con el fin de conocer el tipo de usuarios que somos, nuestros comportamientos y gustos. Y también hay compañías que, en lugar de conseguir estos datos sin el conocimiento y consentimiento de los usuarios, ofrecen la posibilidad de pagarles para conseguir la información que les interesa. Se trata de una nueva forma de ver la adquisición de datos por parte de las compañías que hacen negocio con ellos.

La noticia que he elegido es sobre un algoritmo que permite controlar los datos personales que se facilitan al navegar por Internet. «Con Pay-per-Tracking, el internauta puede controlar su privacidad, ya que él decide las páginas que dejará que le rastreen, según la categoría temática bajo la que están clasificadas. Además, el algoritmo permite bloquear el acceso a las empresas que pretenden continuar rastreándolo». El proyecto ha sido diseñado por Javier Parra-Arnau, investigador del Departamento de Ingeniería Informática y Matemáticas de la Universidad Rovira y Virgili (URV).

• Noticia en SINC: Un algoritmo permite controlar los datos personales que se facilitan la navegar por Internet.

Recuérdale a tus iKids que no sólo tú puedes chequear su historial de navegación; en función de la web, otros también pueden hacerlo. Y explícale qué son las cookies y cuál es la diferencia entre un anuncio pagado y un contenido no promocionado. Y siempre, siempre, siempre, insiste en que no rellene formularios online ni vaya compartiendo sus datos más íntimos y personales con los demás.

Compartir nuestros datos es el punto de partida para recibir toneladas de mails publicitarios, para que te ofrezcan una «mejor experiencia de usuario» y una pantalla con contenidos «adaptados a tus intereses». Así que no creas que ves solo lo que tú quieres, porque en la mayoría de los casos ves lo que otros quieren que veas. Tienes más info en esta crítica de Cultura Más sobre el libro «El filtro burbuja» de Eli Pariser.

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Criptodivisa, bitcoins y el ciber mercado financiero

En los últimos tiempos se habla mucho de bitcoins y blockchain. El bitcoin (BTC) es una divisa digital (también llamada criptomoneda) cuyo uso se da solo en internet y que pretende servir para intercambiar bienes y servicios. Esta transmisión, según los expertos, destaca por ser inmediata, ofrecer alta seguridad gracias a la criptografía que utiliza, poderse usar a nivel mundial y sin intermediarios, permitir transacciones irreversibles y preservar la privacidad. La divida es descentralizada, es decir, no la controla ningún banco ni emisor central. Y blockchain es la cadena de bloques sobre la que se sustenta el funcionamiento del bitcoin. Al final, se trata de una cuestión de confianza, casi como el antiguo trueque; es válida cualquier forma de pago si esta se acepta por toda la comunidad. Los bitcoins también tienen sus propias crisis financieras y nadie puede saber si se mantendrán en el futuro (de hecho, China los quiere prohibir), pero es interesante saber un poco más sobre su funcionamiento. Estas dos noticias puede que te aclaren algunas cosas:

• Tribuna de Javier Molina en El Confidencial: Que no te engañen con el bitcoin.
• Artículo de Rosario Gómez en El País: Criptomoneda – La fiebre especulativa del bitcoin.

Esto de los bitcoins lo mismo no te sirve de nada (todavía) a la hora de abrir conversaciones con los iKids acerca de un uso responsable de la tecnología. Pero es cultura para ti, es semilla de ciudadano digital y es una forma estupenda de ‘chulearse’ un poco delante de adolescentes convencidos de que «mis padres es que de estos temas no saben nada de nada«.

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Besos,

M.